PORQUE MORIMOS Y A DONDE VAMOS

La muerte en términos humanos es la cesación de las funciones orgánicas, en términos esotéricos es el cambio de ciclo con vestido nuevo en otra matriz, en el desarrollo evolutivo o involutivo conforme haya manejado sus valores de acuerdo con la ley Divina.

La muerte en la kábala está representada por el número trece que significa la liberación del hombre. Hay que morir para vivir y morir psicológicamente para poder resucitar.

Como nosotros nunca nos hemos preocupado por investigar los misterios de la vida y de la muerte y la pasamos naciendo y muriendo físicamente creyendo en lo que otros escriben basados en sus concepciones y razonamientos, la mayoría de los humanos le tiene miedo a la muerte y los mas malos aprovechan la situación para hacerlos esclavos de ellos.

Con amenazas de muerte, secuestran, extorsionan, violan, se apoderan de los bienes terrenales, obtienen lo que quieren; nosotros por lo tanto somos culpables de todo lo que nos pasa, y no es nuestro Dios como suele decirlo el común de la humanidad, por culpa de nuestros defectos que cada día son mas grandes y robustos lloramos, reímos, enfermamos, comemos de todo como cerdos, trabajamos para “ mejorar la calidad de vida” , matamos, robamos, celamos, adulteramos, etc. porque estamos dentro de la ley del libre albedrío. La gente que se arma es porque tiene miedo de morir, de perder sus pertenencias, el poder etc., apegado a todos los bienes de la tierra que solo será lodo, agua y fuego en este final que ya comenzó.

Una serie de sentimientos que también son yoes o parte de los pecados capitales, cuando morimos lloramos intensamente al ser querido, vamos a regiones lejanas hasta con dineros prestados a velar o trasladar un difunto que no es nada y que si no estamos en el velorio las familias y los amigos sufren y les queda los remordimientos. A ellos rendimos toda clase de homenajes, canciones, actos litúrgicos y rituales hasta canonizándolo como un santo y buen elemento de la sociedad; como si fuera poco peleamos y demandamos para reclamar sus restos o despojos mortales exigiendo exhumaciones en estado avanzado. Pero lo que ignoramos del difunto, es que él no sabe que se murió y anda alrededor del féretro todo dormido comparando su propio cuerpo con otro muy parecido y también lo llora y mentalmente a través de las ondas cerebrales se contestan con sus duelos, parientes y amigos.

Se debe a que hasta los tres días y medio el ESPIRITU es desconectado de la tierra cuando le cortan el cordón de plata ubicado encima del ombligo que separa el cuerpo físico del cuerpo astral (cuerpo de deseos) o el alma.

Cuando el Maestro Jesús le dijo a uno de sus discípulos ¡Dejad que los muertos entierren a sus muertos! Parientes de un apóstol le reclamaban por que no iba a hacer presencia en el velorio y entierro de un hermano.

Es muy claro, en cábala existe el secreto que, los vivos son muertos vivientes porque han sido muertos y estaban muertos de por vida y ellos (los vivos) con sus egos y sentimientos proceden a enterrar a un muerto que mas adelante será un muerto viviente con respecto a la encarnación durante el proceso de las 108 vidas.

El secreto cabalístico contempla que todos los astros del universo pasaron por ese proceso rápidamente y son muy avanzados, considerados seres superiores; en esos mundos el que se muere es porque quiere cambiar de cuerpo por su propia cuenta y nadie se da cuenta, es como almorzar en un restaurante, sencillamente porque ellos dominan la muerte. Mientras que a nosotros nos ven como bestias, porque en realidad tenemos cachos y cola, signo de la ignorancia y símbolo del demonio.

Luego de cortado el cordón de plata el cadáver se descompone, y el astral o alma continúa andando al pié del ataúd sin saber aún que está muerto y tratando de entrar a su cuerpo en todo un desespero hasta que la Ley Divina lo despierta, le da conciencia mientras lo pone a observar el video de lo bueno y lo malo para Dios de lo que hizo en la vida.

Después es llevado a la región de los muertos llamada esfera principal astral de Jetzirah parte inferior de la quinta dimensión de Nezath, esta región tiene dos divisiones o mundos: el mundo de Assiath donde van los difuntos que han sido fornicarios y posean todos los yoes, son fríos y tenebrosos a una temperatura de 30 grados bajo cero.

Los demás difuntos que fueron abstemios y no tuvieron relaciones sexuales ni se masturbaron van al mundo de “los niños” región llamada Nogah, en lo referente al proceso de las l07 muertes y vidas, porque después de esta, en que estamos vamos para el abismo o éxodo.

Ahora las personas que practicaron la ciencia de la alquimia sexual han sido castos y vienen muriendo en sus vidas psicológicamente en la eliminación de los pecados capitales (yoes) se llaman discípulos, después de la muerte van a la región superior principal del astral cielos del Nirvana con la compañía de Jerarquías y Ángeles, están llenos de energía, juventud y fuego.

Estos discípulos son conscientes y saben que mueren, como mueren, quienes están a su lado y cuando van a morir, no le temen a la muerte, y vencen a la muerte. Saben todo antes de morir, en el proceso de la muerte y después de la muerte, que diferencia ¿verdad?

Conclusión: los seres humanos mueren 108 veces, porque nos dan 108 vidas para convertirnos en un maestro y vencer la muerte con el fin de resucitar, quien vence la muerte es porque ya venció al Satán y sus demonios.

Luego de las 108 vidas seréis juzgados y es el juicio final del que estoy dando a conocer; nosotros los habitantes de este planeta estamos en la última vida, si vencemos la muerte vamos para el cielo, si no la vencemos vamos para el infierno o Avitchi de los Indonstanes.

No obstante las jerarquías a través de los Avataras nos dieron una oportunidad debido a la pérdida de la cosecha de almas, el que elimine al menos el cincuenta por ciento no será juzgado y tendrá la oportunidad de continuar trabajando en la eliminación de los egos en la sexta raza, se llamará La Korathi va a tener asentamiento en la región del casquete polar del ártico.